Historia del Fondo Kiwanis para la Infancia

Comenzó con 25 dólares de plata. Esa es la donación que Walter Zeller hizo en 1940, la primera de nuestra historia, un año después de que se estableciera nuestra fundación. Pero detrás de la donación de Zeller había una idea más amplia: inspirar a sus compañeros de Kiwanienses para que se basaran en esa donación. Y así lo hicieron, con una subasta que acabó convirtiendo aquella primera contribución en 625 dólares.

Desde entonces, los miembros de nuestra fundación se inspiran mutuamente.

Hoy se nos conoce como el Fondo Kiwanis para la Infancia porque convertimos su generosidad en proyectos que llegan a niños de todo el mundo. Los socios Kiwanis, los clubes y distritos nos han confiado activos por valor de varios millones de dólares. Estos activos brindan estabilidad a nuestro trabajo y nos ayudan a proporcionar asistencia financiera que ayuda a Kiwanienses a servir a los niños de todo el mundo, y tal vez incluso de su ciudad natal.

Únete a otros Kiwanienses para marcar la diferencia en la vida de los niños.